Esta manana me desperté con la musiquilla esquizofrénica de mi teléfono móvil. Era César. «Lo siento pero no continúo con el viaje». Me quedé sin palabras.
Estamos aún en Italia para esperarles. Dándoles un poco más de tiempo para organizarse (haze una semana que tendríamos que haber partido). ¿Qué hacemos ahora con las herramientas y piezas de recambio que tienen en su poder? Gastarnos más y más dinero en ineficientes transportistas. Está claro.
«El coche no está listo». Y nos lo dicen 3 días antes de la cita en Roma. Todo un detalle.
Si su 2cv no está listo y César no viene. Por cojones Evan se queda. Nosotros solamente tenemos dos puestos en «Naranjito». Lo habíamos organizado así, nosotros cargaríamos con todo el material pesado y ellos con los viajeros y amigos que se unieran a lo largo del mundo. Ahora estamos solos. Solos y yo personalmente defraudado. Cansado. Muy agobiado. Triste.
Miguel y yo continuamos. Es nuestro sueño y vamos a luchar. No abandonaremos así como así. Aunque tengamos que terminar el viaje a pie y cargando el corazón de «Naranjito» en una bolsa.
No estoy demasiado enfadado y en breves se me pasará por completo. Es comprensible un abandono. Mejor hoy que mañana. Pero con las maneras , a veces, se pierde la razón.
Ahora lo más importante es retomar el viaje . Grecia y Bulgaria nos esperan.
En cuanto tomemos alguna decisión os la haré saber. Ahora no me apetece escribir.
«De lo que veas creete la mitad y de lo que no veas no te creas nada» Esto lo escribió un rapero zaragozano. Tenía razón.
César. Evan. Un placer.
Es un momento del viaje complicado. Pero que carajo!!! siempre me quedarà Battiato. no?